La Biblia Nueva Versión Internacional (NVI) ha dejado una huella imborrable en la historia de las traducciones bíblicas en castellano. Desde sus inicios asociados al Nuevo Testamento de la New International Version (NIV) hasta su evolución hacia una versión completa, la NVI ha transformado la manera en que millones de personas se relacionan con la Palabra de Dios. En este artículo, exploraremos la fascinante historia detrás de la NVI, desde sus primeros pasos hasta su posición como un regalo divino para el pueblo latinoamericano.
Los Primeros Pasos de la NVI
La NVI se dio a conocer al mundo hispanohablante en 1979, inicialmente asociada al Nuevo Testamento de la NIV. Esta conexión con la renombrada versión en inglés marcó un hito, ya que la NIV logró desplazar a la tradicional King James, una hazaña sin precedentes en la historia de las traducciones bíblicas en inglés. Durante la década de los ochenta, la NVI ganó difusión en América Latina, preparando el terreno para un proyecto aún más ambicioso: la traducción del Antiguo Testamento.
El Ambicioso Proyecto de Traducción
A finales de los ochenta, la posibilidad de traducir el Antiguo Testamento cobró fuerza, llevando consigo la formación del Comité de Traducción Bíblica (CTB). El Dr. C. René Padilla, en ese entonces secretario general de la Fraternidad Teológica Latinoamericana (FTL), desempeñó un papel crucial en la formación de este comité. Para coordinar el proyecto, se contó con la participación del Dr. Pedro Arana Quiroz y, posteriormente, del Dr. Luciano Jaramillo.
El CTB: Una Selección de Expertos
El CTB se conformó por expertos latinoamericanos con destacada trayectoria en ciencias bíblicas y profundos conocimientos en el uso del castellano. Entre ellos se encontraba el Dr. Luciano Jaramillo, cuya rica experiencia incluía roles como sacerdote católico, pastor presbiteriano, presidente de la Confederación de Iglesias Evangélicas de Colombia y rector del Colegio Americano de Cali. Posteriormente, asumió la coordinación de un equipo de traductores, dispersos en diferentes lugares de América Latina y Estados Unidos.
Colaboradores Destacados en la Traducción del Antiguo Testamento
La traducción del Antiguo Testamento contó con la contribución de destacados colaboradores, entre ellos el Dr. Esteban Voth, el Licenciado Alfredo Tépox, el Dr. Edesio Sánchez Cetina, el Lic. Oscar Humberto Pereira García, el Lic. Humberto Casanova Roberts, el Lic. Cosme Damián Vivas Valencia, y el Dr. Mariano Ávila. La participación del Dr. Ronald F. Youngblood, único miembro del CTB cuya lengua materna no es el castellano, enriqueció el proceso de traducción.
La Etapa Final y Colaboración Tecnológica
En la última etapa del trabajo sobre el Antiguo Testamento, se sumaron al equipo los doctores Moisés Silva y René Padilla. Cabe destacar que el CTB contó con avances tecnológicos notables, y la colaboración del Lic. Carlos Rey Stewart R. fue esencial. Este experto en el manejo de la computadora y conocedor profundo del castellano contribuyó significativamente al proyecto, supervisando la publicación de varias Biblias destacadas.
La Traducción del Nuevo Testamento y la Comisión de Estilo
Especialistas como el Dr. Moisés Silva, el Dr. C. René Padilla, y el Dr. Hugo Zorrilla se encargaron de la traducción del Nuevo Testamento. La Comisión de Estilo, integrada por Jaramillo, Tépox, Silva, Padilla y Stewart, desempeñó un papel crucial en garantizar una traducción coherente y fiel al texto original.
Proceso Completo: De la Idea a la Realidad
La complejidad del proceso de traducción del Antiguo Testamento involucró etapas fundamentales. Desde la colaboración con la Comisión de Estilo, que contó con la participación de escritores reconocidos como el Dr. Emilio Antonio Núñez y el Dr. Samuel Escobar, hasta la integración de tecnologías avanzadas bajo la dirección de Carlos Rey Stewart, la NVI fue dando forma a su identidad única.
Testimonios Reales de Impacto
La NVI ha dejado una impresión duradera en la vida de aquellos que han tenido el privilegio de interactuar con ella. Testimonios reales de personas y pastores destacan la claridad para estudiar y meditar la voluntad de Dios que ofrece la NVI. Esta versión se ha convertido en una herramienta fundamental en el área misionera y de evangelismo, inspirando y transformando vidas a lo largo de los años.
José Soriano dice: «…esta versión es mucho más fácil de entender. Las palabras y las traducciones son muy precisas.».
Diferencias con la Biblia Reina Valera de 1960
La NVI se distingue de la Biblia Reina Valera de 1960 en varios aspectos. Aunque ambas comparten el propósito de transmitir la Palabra de Dios, la NVI utiliza un lenguaje contemporáneo y sencillo, lo que facilita su comprensión para una audiencia moderna. Además, la fidelidad a los textos originales hebreo, griego y arameo se mantiene en la NVI, pero con un estilo contemporáneo que conserva la dignidad y elegancia del lenguaje bíblico. La Reina Valera de 1960, en cambio, se adhiere a una estructura más formal.
Un Regalo Divino para la Comunidad Hispanohablante
La Biblia Nueva Versión Internacional es un regalo divino para el pueblo latinoamericano. Desde sus humildes inicios hasta su posición como una de las traducciones más influyentes, la NVI ha marcado un hito en la historia bíblica en castellano. Sus colaboradores, expertos y el trabajo arduo del CTB han dado como resultado una obra que trasciende el tiempo y sigue siendo una fuente de inspiración y guía espiritual para millones de personas. La NVI representa la culminación de un esfuerzo y la respuesta a la oración de aquellos que anhelaban tener una Biblia que conectara con sus corazones y mentes.
Retomado de: Historia de la NVI (Nueva Versión Internacional), la traducción moderna de la Biblia más leída en español (editorialhccp.com)